En el Día del Trabajador Social la UQ reafirmó su cooperación con la U. Católica de Friburgo

El programa de Trabajo Social de la Universidad del Quindío celebró una jornada académica dedicada a conmemorar el Día del Trabajador Social en Colombia, con un evento que fortaleció el diálogo intercultural y la cooperación internacional entre la alma mater y la Universidad Católica de Friburgo (Alemania), en el marco del proyecto Erasmus+, financiado por la Unión Europea.

Durante la jornada, docentes, estudiantes e invitados internacionales reflexionaron sobre los desafíos contemporáneos del trabajo social y las oportunidades que surgen a través de los convenios de movilidad académica. “Este evento nos permitió celebrar la labor del trabajador social y, al mismo tiempo, consolidar una alianza académica de cooperación técnica que abrirá puertas para que nuestros estudiantes proyecten su formación en Europa, mientras que los jóvenes europeos puedan conocer la realidad social y comunitaria de Colombia”, destacó Rocío del Pilar Collazos, docente del programa.

El encuentro contó con la participación del decano de la Facultad de Ciencias Humanas y Bellas Artes, Jhon Jaime de la Rosa Bobadilla, quien resaltó la importancia del intercambio académico y cultural como eje para el fortalecimiento profesional. “Este es un espacio que nos permite conmemorar desde la academia y, al mismo tiempo, celebrar la firma del convenio de cooperación entre la Universidad del Quindío y la Universidad Católica de Friburgo, dentro del proyecto Erasmus, que involucra a docentes, graduados y estudiantes de ambas instituciones”, explicó.

Por parte de la delegación alemana, participaron Naomi Hiroe, directora de la Oficina de Relaciones Internacionales; Claudia Luzar, profesora del programa de Trabajo Social; y Juliana Seidel, asistente científica de la Universidad Católica de Friburgo, junto con la estudiante Carlotta Rappert, quien compartió su experiencia como futura participante del intercambio académico. “Con este convenio buscamos promover el aprendizaje conjunto, en condiciones de igualdad. No se trata de una cooperación en la que un país impone su visión, sino de un trabajo horizontal en el que ambas universidades aprenden mutuamente”, afirmó Juliana Seidel.

Por su parte, Naomi Hiroe invitó a los estudiantes uniquindianos a aprovechar estas oportunidades internacionales: “El mundo es muy grande y los trabajadores sociales necesitan una mente abierta. Que salgan al mundo, que se atrevan a conocer otras realidades y a compartir lo que Colombia tiene para enseñar”.

Desde la perspectiva estudiantil, Carlotta Rappert, de la Universidad Católica de Friburgo, resaltó el valor de estos espacios: “Son oportunidades que permiten el intercambio, el diálogo y la reflexión crítica. Estudiar en otro país implica salir de la zona de confort y aprender nuevas formas de ver el mundo”, expresó.

El evento reafirmó el compromiso de la universidad de los quindianos con la proyección internacional del conocimiento y con la formación de profesionales sensibles, críticos y solidarios, capaces de aportar desde el trabajo social a la transformación de sus comunidades y del entorno global.